En mí trabajo como profesional independiente, el 30% de mi tiempo de trabajo lo uso en el cliente (entregando servicios que no puedo entregar de forma remota), el 70% restante se divide entre la oficina (en casa) y los viajes.
He estado trabajando de esta manera durante unos 20 años: al principio éramos solo mi esposo y yo y fue fácil organizarme, luego llegó nuestra primera hija y 10 años después la segunda, allí no fue tan fácil organizarse. Hoy, somos un equipo ¡Sí, somos un equipo muy fuerte! Lo digo con mucho orgullo. Tal vez solo somos los cuatros, pero en los últimos años hemos aprendido a actuar en equipo, alineando los objetivos personales, familiares y laborales. Todos en casa saben las tareas importantes a realizar y nos organizamos para eso. Mi esposo y yo, enmarcamos nuestras horas de trabajo tratando de no perder el foco entre juegos de voleibol y las idas a la escuela; cuando esto no es posible, tenemos una niñera que nos ayuda.
De aquí la importancia del autoconocimiento y el conocimiento del otro, en este caso de mi esposo y mis hijas: soy consciente de mis momentos de mayor productividad y estos están dedicados a las actividades más importantes y exigentes del día. Las tareas del hogar se dividen entre todos, ninguno es excluido.
Mi estrategia de trabajo remoto
Siempre me levanto temprano, desayuno con mi familia y luego llevo a mis niñas a la escuela. Cuando regreso tengo aproximadamente una hora para dedicarme a mí o a la casa antes de comenzar a trabajar. Las reglas de vestimenta las mantengo simples: comodidad y un truco de maquillaje, me pone en el humor perfecto para iniciar mi jornada y si tengo una videoconferencia no tengo que apresurarme para estar lista o no poder participar. Desde hace 4 años mi oficina se encuentra en mi casa, primero ocupaba un rincón en mi habitación, es importante asignar un espacio solo para el trabajo, donde podamos concentrarnos en ser productivos, obviamente trabajo sobre la base de objetivos, dando prioridad a cada uno de ellos e incluyo momentos de pausa que me dedico a mí misma (no a la casa).
Trabajo remoto en tiempos de Covid-19
Aunque estoy acostumbrada a trabajar desde casa, esta situación ha cambiado mi entorno laboral, precisamente porque 3 estamos juntas en casa; Sí, porque mi esposo quedó atrapado en Argentina.
Tengo una ventaja en esta situación por algunas razones:
-Ya estoy acostumbrada a trabajar desde casa
-Ya estoy acostumbrada a trabajar con la familia en casa, mi hija de 16 años es un apoyo indispensable.
-No tengo problemas de concentración, incluso si hay caos puedo aislarme. Dicho esto, ¿qué estoy haciendo estos días?
-Por la mañana, mi oficina se convirtió en un aula del Liceo Classico di Sansepolcro, con la más pequeña (5 años) decidimos una rutina matutina. Conozco sus momentos pacíficos y los dedico a las actividades importantes que requieren mi intervención sin la participación de otros.
– La técnica Pomodoro, la uso con ella, solo que los tiempos de descanso son tan largos como los de mi compromiso laboral, se lo expliqué y parece que está funcionando en este momento.
– Busco actividades que la entretengan sentada a mi lado, cuando no tiene ganas de jugar: collage, colorear, pintar, hágalo usted mismo…, ella se sienta a mi lado y mientras yo trabajo en la computadora, ella hace esta “tarea”.
-Tengo reuniones por la tarde, cuando puedo recuperar la posesión de mi oficina y mi hija mayor entretiene a la menor, por la mañana puedo hacer llamadas telefónicas o videollamadas con quienes me conocen bien y saben que en cualquier momento mi hija puede venir y pedirme que ponga el vestido en las muñecas.
-Obviamente, no todos los días son iguales y estamos de humos para enfrentar estas actividades de la misma manera. Hay días en que no puedo terminar lo que había propuesto, no importa se reprograma solo.
Esta estrategia no es el resultado de un día, sino de años de trabajar en casa, es adecuada para mí y para mi familia, espero que sirva como punto de partida en la construcción de tu propia estrategia personal.
Fuente: https://idexpansive.com/la-mia-strategia-di-remote-working/
