“Elige un trabajo que te guste y no tendrás que trabajar ni un día” asegura una frase de Confucio, pero qué pasa cuando a la motivación la supera el estrés, las entregas a último momento te llenan la casilla de correo y el trabajo comienza a capitalizar tu tiempo fuera de la oficina.
Cada día desde la oficina o trabajos de co-working, los colaboradores tenemos la oportunidad de mostrar una dualidad en nuestros comportamientos, en primer lugar, el desgaste físico y mental que implican las exigencias del puesto y por otro lado, al alcanzar los objetivos del día aumentamos el bienestar y la sensación de logro.
Al hablar de la “gestión de la felicidad” nos referimos a la capacidad de una organización de ofrecer a sus colaboradores estrategias que les permitan enlazar su propósito personal con su actividad económica, para conducir su desempeño con las metas de la empresa.
En este sentido, de acuerdo con investigaciones realizadas por Harvard Business Review y Gallup (Estados Unidos, 2017) colaboradores felices generan 31% más productividad, 44% mayor retención, 300% mayor innovación y pueden llegar a reducir en un 125% el síndrome del burnout.
El experto Nick Marks sugiere cinco pautas para promover la felicidad individual que dan un primer acercamiento a los gestores del talento sobre cómo motivar equipos de alto desempeño. La primera pauta es conectar con otros, ser activo, prestar atención al entorno, aprender de manera continua y ser solidario.
¡Reto Aceptado!
Cuando las organizaciones aceptan el reto de ofrecer mayor valor a sus colaboradores para evitar la fuga de talento e incrementar su compromiso, deciden no sólo centrarse en los indicadores tangibles sino que los intangibles toman relevancia.
Entre estas nuevas propuestas destacan:
– Equilibrio entre la vida laboral y personal
– Mejora de la seguridad en el entorno de trabajo
– Mejor acceso a programas de salud
– Participación en acciones de responsabilidad social empresarial
– Actividades transversales entre grupos y departamentos diferentes
– Transparencia en todo nivel organizacional
– Clima laboral positivo basado en la comunicación eficaz