Recientemente descubrimos que el Accountability es un concepto centrado en el desarrollo del talento de las organizaciones, y que define la capacidad que tienen los líderes de ejercer su rol rindiendo cuentas por sus resultados de manera autónoma y responsable.
Sin embargo, aplicar esta herramienta en las compañías resulta indispensable cualesquiera sean sus objetivos y tamaño pues puede generar grandes resultados. La única manera en la que puedes llegar a altos niveles de ejecución es precisamente asegurando que vas cerrando las pequeñas brechas de desempeño que, de forma natural, vamos descuidando porque, finalmente, somos seres humanos y nos equivocamos.
Asimismo, independientemente del cargo que ocupe cada uno, en una organización todos deberían tener esta disposición a la rendición de cuentas. Hay que asegurar que todos tengamos la capacidad de ir cerrando brechas, independientemente de nuestro cargo.
Los pasos a seguir para aplicar esta herramienta en los equipos de trabajo son los siguientes:
- Objetivo. Establecer claramente un objetivo, así cada miembro podrá delimitar sus funciones y responsabilidades
- Resultado. Darle seguimiento al resultado para saber si hay o no una brecha
- Feedback. Hacer seguimiento de cada miembro a través de un diálogo constante a sus actividades.
- Compromiso. Tanto las personas como los equipos deben hacerse dueños de lo que van hacer desde antes, desde un principio, desde el momento mismo en que se toma una tarea, – a priori-, desde que se acepta formar parte de un proyecto.
- Proactividad. Una vez que el equipo identifique su compromiso puede proponer planes de acción o rutas para su ejecución.
- Responsabilidad. Significa que cada miembro se hará cargo de los resultados de su trabajo con disposición a cumplir cuentas.