Los colaboradores freelance están cobrando un protagonismo cada vez más relevante en el mundo organizacional: estos trabajadores permiten ayudar a la organización sin formar parte de ella. De la mano de las nuevas tecnologías, esta modalidad permite abrir la posibilidad de contratar gente de cualquier parte del mundo.
La generación millenial se relaciona plenamente con la explosión tecnológica, por lo cual busca ocupar su tiempo en actividades que se alineen con ella. A la hora de elegir un empleo, las instituciones tradicionales van quedando atrás. Según una encuesta de Deloitte, el 98% de los millenials desea trabajar en modalidad freelance.
Del lado de las organizaciones, este tipo de modalidad contractual va ganando terreno. Esta realidad impone retos a la hora de gestionar el compromiso de los colaboradores que, sin formar parte de la organización, aportan su trabajo.
Ya sea para bajar costos o bien, amoldarse a las formas de trabajar preferidas por ellos, hoy la tendencia es pensar en los trabajos como un conjunto de tareas con foco en la experiencia del cliente, la experiencia del empleado y en la propuesta de valor en la organización que le brinda a la sociedad: gran desafío para el área de talento humano.
“Este segmento de trabajadores ha crecido considerablemente, llevando a las organizaciones a considerar estratégicamente este tipo de acuerdos de trabajo en sus planes de crecimiento; pero aún hay un largo camino por recorrer”, Reporte global de Tendencias de Capital Humano de Deloitte.
Si bien durante años las organizaciones consideraban a la fuerza laboral alternativa como un complemento, cada vez va ganando más peso en las empresas. Hoy, al representar un gran porcentaje de la población postulante, el desafío de los departamentos de Recusos Humanos es entender qué motiva a los millenials: reto fundamental para llevar una correcta gestión del talento humano.