Crisis, palabra tan sonada en estos días que se ha vuelto ya del diario vivir a nivel personal y empresarial, pero ¿qué es la crisis?, ¿cómo podemos definir la crisis para una empresa? En términos generales podemos denominar la crisis como esas situaciones que provocan cambios inesperados que afectan de una u otra forma una estructura ya planificada. Para una empresa en particular, la crisis puede ser interna cuando algo de lo que no pudimos percatarnos a su debido momento nos desestabilizo en el aparato normal de funcionamiento en nuestra organización, pero también la crisis puede ser externa y esta es la que más acostumbrados estamos a ver, sentir, palpar, cuestionar y hasta atacar con todas nuestras fuerzas.
En muchas ocasiones y a modo de ejemplo, es común encontrarse con empresas que tienen proyectos, tienen personas, grandes profesionales y grandes ideas, con incluso proyectos adjudicados, pero la crisis para ellos es donde conseguir dinero líquido. Esto es un factor externo de estrés, debido a que no es algo que podamos dar solución desde la toma de decisiones dentro de la empresa, así podemos señalar muchos factores exógenos que generan estrés a las empresas como la devaluación de la moneda, las políticas de los gobiernos, la competencia, el desempleo y mochos factores más que definitivamente no controlamos.
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Pero ¿cómo hace una empresa en estos días para poder sobrevivir a un entorno tan cambiante y en ocasiones convulsionante, más si la empresa es pequeña o de muy pocos recursos?
Permíteme compartirte algunos consejos:
- Forma tu carácter de empresa, la supervivencia hoy por hoy depende de la confianza que los miembros y el entorno de la empresa tengan en ella. No se trata ni de vender triunfalismo. Son tiempos duros para todos. Di la verdad: hay gastos que hace seis meses eran aceptables y hoy ya no, se coherente con tu entorno y con tus ingresos.
- Mantén el espíritu de tu gente en alto, una tentación común durante la crisis es recortar gastos a veces muy drásticamente. No lo hagas. No es época para abusar de las comidas de empresa ni para comprar sin ton ni son. Pero celebrar es importante. Busca la manera de que todo el equipo disfrute junto cuando haya algo que celebrar. Se creativo, hay muchas formas de ahorrar y mantener el ánimo de la gente, involucrar a todos siempre resulta más barato.
- Ojo con el manejo de tu proveedor, muchas veces las empresas quieren que el proveedor corra con las consecuencias de lo que un banco no le ha podido prestar, esto es un error, hay que mantener la buena relación con el proveedor, pedir lo necesario y pagar a tiempo. Los tiempos difíciles tarde o temprano pasaran, no dejes que estos te den una mala reputación, esa si es difícil de quitar cuando ya la tienes.
- Haz lo mejor con lo que tienes, métete en cosas que generen caja rápidamente, que no requieran inversiones fuertes y que el trabajo duro de tu gente pueda hacer sostenible en el primer año. Usa tus propios recursos. Se trata de que den lo justo para generar caja y cubran algunos de los gastos. Cuando la economía mejore, estarás por encima del promedio de aquellas empresas que buscan ser auto sostenible.
- Apuesta por la innovación, busca nuevas líneas, busca nuevos clientes, busca nuevos mercados, busca nuevos productos, desarrolla nuevas estrategias, innova, innova, innova, en todas las áreas y en todos los sentidos innova.
- Escucha, de alguna forma los mercados hablan, escúchalos, los mercados son personas, está atento, tienen también sentimientos, está atento a ellos, entiéndelos. Aprende el arte de escuchar los diálogos de los mercados porque en ellos está la clave de tu desarrollo empresarial, lo importante de aprender a escucharlos, es que aun en el peor momento de crisis que tu empresa pueda estar pasando, el mercado estará siempre diciendo sus necesidades.
- Desarróllate, por sobre todo busca la forma de desarrollarte, desarróllate tú, desarrolla tu gente, invierte en tu desarrollo, desarrollarse implica un compromiso con la búsqueda de la excelencia, al final invertir en tu desarrollo y en de tu gente siempre te devolverá multiplicado cada centavo que le hayas apostado.
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En conclusión; no existe un solo camino ni una fórmula mágica que permita a una empresa en crisis salir de la misma, pero algo es seguro y es que tienes que actuar, sin importar la fórmula que decidas implementar, actúa, al final las acciones conllevan resultados que podrás medir y entonces te darás cuenta si las decisiones fueron o no acertadas, pero lo más importante es que en ese momento ya estarás muy lejos del punto en el que te encontrabas originalmente. No permitas que una crisis interna o externa termine con tu empresa, seguro para todo hay una salida, si no eres capaz de verla por ti mismo entonces busca la ayuda de un consultor profesional.
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